lunes, 24 de abril de 2017

aqueronte

por la vida,
se viene a andar en línea recta,
se quiere, se desvive por hacerlo,

los que cambiáis de dirección
sin intermitentes,
a los que os quema el suelo
avistando al autobús,
los que adelantáis por la derecha,
(¡si no hay acera!)
los que disfrutáis negándome la balconada,
(sí, la culpa es mía,
                               pierdo todos los paraguas,
 todos,
           todos,
                     tarde o temprano,
                                                 los pierdo),
los perros del hortelano,
que os ladráis la vida en los umbrales,
a los que en la cola del super,
                                               se os revela la metafísica,
cuando a los demás es lo que nos causa insomnio,
los que hacéis un amago de acercamiento,
y uno se aparta y queda como saludando a quien no conoce,

los que podáis las ramas del pensamiento,
¡qué envidia!

mierda,

se me olvidan tantos,

tendréis asegurado
cada uno,
un perfecto círculo
en el infierno,

no se puede andar sin pensar,

n
i
e
n
l
í
n
e
a
r
e
c
t
a
.





No hay comentarios:

Publicar un comentario